No eres tú la responsable de la indisponibilidad emocional de otro.

Incluso puede que ese otro ni siquiera sea muy consciente de que lo es. Tal vez al comienzo tenga ganas reales de algo contigo, por eso te embarcas en la aventura de quererlo, parece mutuo el sentimiento, hasta que algo en su interior le obliga a salir corriendo. Lo malo es que muchas veces lo hace en silencio.

Ese ser que está contigo pero al mismo tiempo no, puede estar lleno de heridas, de malos recuerdos, de experiencias con olor a derrota y de demonios del pasado, viviendo en su corazón en el presente.

Quiere querer con toda su alma, pero no puede, por eso prueba con una y con otra sintiendo siempre el mismo vacío, no se queda con ninguna, porque no conoce de entrega.

Podrías haber tropezado también con un no disponible emocional frío y calculador.

Ese que te miente con consciencia, que te da aspirinas con sabor a fruta, para que te las tomes igual.

Que finge amarte cuando está contigo y, de pronto, desaparece sin decir adiós, para luego reaparecer como si nada hubiera pasado, y lo hace porque sabe que tú siempre estarás ahí esperando.

Este disfruta tu cuerpo, hay algunos conscientes y preocupados también de tu goce, otros que ni te miran cuando te lo hacen y jadean solos y sordos a tu silencio en cama.

Estos no te dan ni un centímetro de su dimensión emocional, pero si les gusta mucho el contacto físico.
En una tercera clasificación, estaría el hombre ocupado.

Lleno de proyectos, tal vez un emprendimiento, incluso un acontecimiento complejo en su vida que le hace poner su energía en un único evento.

No son heridos ni malos, solo quieren estar con alguien, pero a ratos, el cuerpo y el alma piden a otro humano; no pueden mantenerse solos, por eso buscan esos recreos para saciar sus necesidades afectivas.

Cualquiera sea el tipo de personaje con el que tropieces, jamás debe importarte el motivo detrás de su distancia, porque acortarla no dependerá de ti, sino que de él.

Y que triste esperar mucho tiempo el milagro del cambio, porque cuando deje de estar no disponible emocionalmente, es muy probable que no seas tú la persona elegida para compromiso, sino que otra.