No es normal que se ría de ti.
Que minimice tus logros, que le reste importancia a las cosas que le cuentas, priorizando en dicha conversación, las suyas.
Que con sarcasmo te trate de “gordita” y luego le baje el perfil a su afrenta, diciéndote que era una broma, que estás demasiado sensible.
No es normal que te haga quedar mal con su mamá, ni con sus hermanos, ni tampoco que le cuente a ellas, todo lo que pasa dentro de su espacio íntimo.

La ropa sucia se lava en casa, o con un terapeuta de ser necesario; llevar cuentos a la familia, afecta la relación. No hay motivo alguno para que los problemas de una pareja queden en manos de personas que, sin objetividad, podrían perjudicar aún más las circunstancias que los aquejan.

Por eso amiga querida, nada de estas conductas que aquí te expreso, deben ser aceptadas.
La burla, el sarcasmo hiriente, la violación de la intimidad y la falta de voluntad en la resolución de conflictos, son banderas rojas que deben ser consideradas.